Niños jugando. Fotografía de Joan Truñol. Fuente de la imagen: OjoDigital |
"Una mañana se levantó y fue a buscar al amigo, al otro lado de la valla. Pero el amigo no estaba, y, cuando volvió, le dijo la madre: “el amigo se murió. Niño, no pienses más en él y busca otros para jugar”. El niño se sentó en el quicio de la puerta, con la cara entre las manos y los codos en las rodillas. “Él volverá”, pensó. Porque no podía ser que allí estuviesen las canicas, el camión y la pistola de hojalata, y el reloj aquel que ya no andaba, y el amigo no viniese a buscarlos".
Leer el cuento "El niño al que se le murió el amigo"
Me encanta este cuento de "Los niños tontos" y ese crecer apresurado en una noche, pobre.
ResponderEliminarAbrazos Fran
Sí, está muy bien. La última frase le da rotundidad al cuento.
ResponderEliminarCuídate, Rocío.
Saludos
Genial cuento, no lo conocía.
ResponderEliminarEnhorabuena por el blog y por la sección.
Saludos,
juan