Avión comercial de la compañía Air France. Fuente de la imagen |
"Un mecánico ha detectado durante una revisión realizada en Boston que a un avión de la compañía Air France le faltaban treinta tornillos. La noticia pone los pelos de punta, no por la ausencia de esos treinta tornillos –ignorados en la revisión anterior, realizada en China–, sino porque el avión no los haya necesitado para surcar los cielos. Air France ha confirmado los hechos y ha puesto en marcha una investigación. Lo que me asusta es que esa investigación no tenga por objetivo sancionar a los culpables del despiste, sino calcular cuánto podrían ahorrarse al año si cada avión de la compañía prescindiera de treinta tornillos aparentemente inútiles".
TORNILLOS
Un mecánico ha detectado durante una
revisión realizada en Boston que a un avión de la compañía Air France le
faltaban treinta tornillos. La noticia pone los pelos de punta, no por la
ausencia de esos treinta tornillos –ignorados en la revisión anterior, realizada
en China–, sino porque el avión no los haya necesitado para surcar los cielos.
Air France ha confirmado los hechos y ha puesto en marcha una investigación. Lo
que me asusta es que esa investigación no tenga por objetivo sancionar a los
culpables del despiste, sino calcular cuánto podrían ahorrarse al año si cada
avión de la compañía prescindiera de treinta tornillos aparentemente inútiles.
¿Exagero? En absoluto. El verbo “recortar”,
tan de moda hoy día, es un rasgo de identidad de la aviación comercial. Quien
haya subido alguna vez a un avión sabrá a simple vista la obsesión de las empresas
aerolíneas por recortar. Por ejemplo: espacio. Si consiguen hacinar a cientos
de personas adultas en asientos para muñecas Nancy en aras de mayor
productividad, ¿por qué no iban a ahorrarse el gasto de tanto tornillo? Al fin
y al cabo, los altos ejecutivos están obligados a justificar sus sueldos
desmedidos recortando los derechos de sus afligidos clientes. Vivimos en una
sociedad piramidal en la que una amplia base recortada sustenta el estatus de los pocos agraciados que habitan
la cúpula.
Si queremos sobrevivir a estos tiempos tan
duros, hemos de acostumbrarnos a ser proclives al recorte y asumir que en este
justo instante ciertos lumbreras están maquinando cómo reducir nuestras
prestaciones, quién sabe si en sanidad, cultura, sueldos o tornillos.
(Artículo publicado en la contraportada de El Periódico Extremadura el miércoles, 30 de noviembre de 2011).
(Artículo publicado en la contraportada de El Periódico Extremadura el miércoles, 30 de noviembre de 2011).
Nota: narrativabreve.com es un blog sin ánimo de lucro que trabaja como espacio de creación y redifusor de textos literarios, y en señal de buena voluntad indica siempre -que es posible- la fuente de los textos y las imágenes publicados. En cualquier caso, si algún autor o editor quisiera renunciar a la difusión de textos suyos que han sido publicados en este blog, no tiene más que comunicarlo en la siguiente dirección: ciconia1@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
narrativabreve.com agradece tus comentarios.
Nota: el administrador de este blog revisará cada comentario antes de publicarlo para confirmar que no se trata de spam o de publicidad encubierta. Cualquier lector tiene derecho a opinar en libertad, pero narrativabreve.com no publicará comentarios que incluyan insultos.